Razones por las que el blanco en la cocina NO es siempre una buena opción   

Cuando pensamos en diseñar o renovar nuestra cocina, la opción predeterminada suele ser el blanco. Y sí, pensamos en él debido a que es un color que queda muy bien con casi todo y es fácil de contrastar, peeeeero… aquí es donde deberás leer bien. 
 

Aunque este color tiene sus beneficios, es importante conocer las desventajas y explorar otras opciones que pueden agregar más calidez, personalidad y encanto a este espacio central de nuestro hogar. Te invitamos pues a adentrarte un poco más en este artículo y a dejarnos al final del mismo tu decisión. 

Las desventajas del blanco en la cocina 

Es innegable que este color tiene sus encantos: amplía visualmente el espacio, se combina fácilmente con otros colores y accesorios, y aporta una sensación de luminosidad. Sin embargo, hay desafíos que vienen con este tono que debemos considerar antes de darle el protagonismo total a nuestra cocina. 

Primero, la suciedad se hace más evidente en una cocina totalmente blanca, lo que puede afectar la elegancia y dar una sensación de frialdad. Además, con la exposición prolongada al sol, el blanco tiende a decolorarse y perder su brillo inicial, requiriendo un cuidado exquisito para mantener su aspecto impecable. 
 
Adicionalmente, el blanco por sí solo carece de gracia. Esto quiere decir que debes sumarle detalles de todo tipo (cuadros, plantas, lámparas, texturas, etc.) para que tu cocina no se vea impersonal o fría. 

¿Qué tal otros colores? 

Rompe con la monotonía del blanco y añade calidez y carácter a tu cocina explorando otras opciones de colores y materiales. Un toque de color puede transformar el ambiente y hacer que tu cocina sea más acogedora y única. 

A este respecto, el famoso diseñador Oliver M. Furth, señaló recientemente en una revista de decoración, que la cocina completamente blanca está desfasada. Furth, conocido por ser amante de la innovación, recomendó buscar tonos atrevidos. “Incluye en tu cocina un tono o dos más fuertes que pueden aportar profundidad e interés».  

Por su parte, el famoso interiorista Ken Fulk, también reconoció que a las cocinas blancas les había llegado una «sentencia de muerte». Proclive al diseño de espacios interiores de superficies brillantes, Fulk hace énfasis en que la laca es una gran manera de permitir que en la cocina vivan los colores potentes. De hecho, reconoce que su arma secreta consiste en llevar los armarios a un taller de pintura de automóviles para obtener un acabado impecable. 

Una idea muy interesante, ¿no te parece? 

Mantenimiento menos riguroso 

Como dijimos antes, uno de los problemas del blanco es que el sol directo puede afectarle negativamente, haciéndolo perder su vitalidad con el tiempo. Así pues, optar por colores más cálidos puede ser una solución para mantener la frescura y vitalidad de tu cocina. 

Asimismo, al elegir tonos diferentes al blanco, se puede reducir la visibilidad de pequeños golpes, desperfectos o rayones, haciendo que el mantenimiento sea menos riguroso y más fácil de manejar. 

Definir espacios con color 

No obstante, si eres un amante del blanco, no renuncies a él por completo. Combina este tono luminoso con la calidez de la madera. Introduce toques de madera en tus muebles, encimeras o accesorios para lograr una cocina con más encanto y carácter. 

Por otro lado, si tu cocina es de concepto abierto, el blanco puede hacer que todo parezca fundirse en uno solo. Para evitar esto, introduce notas de color estratégicas que ayuden a definir visualmente diferentes áreas. Puedes experimentar con colores vibrantes en la isla de la cocina o en las paredes para crear contraste y personalidad. 

Desafiar la hegemonía del blanco en la cocina te permite explorar una variedad de colores y materiales que pueden transformar este espacio en algo verdaderamente único. Ya sea introduciendo colores vibrantes, combinando blanco con madera o definiendo áreas con toques de color, hay infinitas posibilidades para hacer que tu cocina refleje tu estilo y personalidad. ¡Atrévete a salir de la zona de confort del blanco y dale a tu cocina el toque distintivo que se merece!