El arte, la arquitectura y la sostenibilidad se hermanan en The Cube, el nuevo edificio de oficinas diseñado por el estudio danés 3XN. Ubicado en Washingtonplatz, esta obra de arte está llamada a ser el nuevo corazón del entorno histórico en el que se encuentra.
El edificio forma parte del plan maestro Europacity, un proyecto urbano formado por 61 hectáreas de tierra adyacentes a la estación de tren principal, ubicada en el centro de Berlin, cerca de instituciones políticas y culturales. Su objetivo es darle a esta ciudad alemana una nueva cara, en la que el vivir y trabajar, no estén exentos de servicios y comodidades.
Arquitectura atractiva, apartamentos con vistas al agua, plazas verdes y paseos marítimos, son otros de los elementos distintivos de Europacity. Así pues, no es de extrañar que la apuesta de The Cube calzara perfectamente con este plan. La hermosa e impresionante edificación se alza pues, en este distrito urbano emergente, como un nuevo hito de sustentabilidad, diseño, digitalización y comodidad.
Por fuera escultórico y por dentro funcional
Con un área total 19.500 m² de espacio elevado modular y altamente flexible, The Cube Berlín, tiene 10 pisos de oficinas, un mercado de alimentos a nivel de la planta baja y vestíbulo de oficina. Además, posee estacionamiento subterráneo, una terraza en la azotea y áreas opcionales para conferencias.
Según, el equipo de diseño de este edificio, el mismo está pensado para ser un catalizador de experiencias sociales, tanto por dentro como por fuera. Las cuatro fachadas que lo componen interactúan creando un límite sutil entre los espacios interiores y exteriores. De hecho, los arquitectos de 3XN pusieron en todas sus direcciones transformaciones geométricas con un patrón prismático de relieves de superficie triangular para deleitar a los transeúntes. Esto evidentemente hace que el edificio sea una verdadera obra de arte que puede ser apreciada desde cualquier ángulo.
En su interior flexible, The Cube puede satisfacer las demandas funcionales de cualquier tipo de oficinas. Los pisos están dispuestos alrededor de un núcleo central y pueden dividirse en unidades separadas o conectarse a través de articulaciones internas. Explican sus hacedores que su idea principal con esto era fomentar la comunicación y la actividad social a través de conexiones dinámicas en el lugar de trabajo.
Por si fuera poco, su acristalada fachada es altamente eficiente en términos de energía. Esta tiene una piel osmótica y su diseño inteligente incluye una aplicación pionera de recubrimientos solares. Asimismo, el edificio posee un conjunto de soluciones técnicas que incluyen la captura de energía del calor, lo cual quiere decir que The Cube es la alta eficiencia energética hecha edificio.
Un edificio pensante
The Cube Berlín es realmente un edificio inteligente de próxima generación. En éste se establecen nuevos estándares para la integración de interfaces de usuario digitales. De hecho, los usuarios/inquilinos pueden interactuar con el edificio a través de su propio dispositivo y bajando una aplicación que impulsa un comportamiento sostenible; aumenta la eficiencia energética que reduce los costos operativos innecesarios y las irregularidades de mantenimiento.
La aplicación permite a los usuarios interactuar con sus espacios de trabajo de formas sin precedentes. Los inquilinos de The Cube tendrán a su disposición una serie de funciones inteligentes y personalizables que les permitirán controlar cosas como el acceso, la calefacción y refrigeración interior, el mantenimiento, suministro de energía, reservas de habitaciones y estacionamientos, carga de automóviles eléctricos / bicicletas y más.
Toda la información operativa del edificio se almacena en un gran servidor de «cerebro digital» que conecta los sistemas inteligentes individuales. Pero lo mas interesante y casi de película de ciencia ficción sobre este edificio, es que establecerá con sus usuario una relación de retroalimentación que permitirá que ambos aprendan unos de otros. Pues, si, como lo lee, el edificio aprende a adaptarse a las preferencias de quienes lo habitan, mientras que estos pueden controlar y adaptar la configuración de The Cube de acuerdo con sus deseos y necesidades.
Así que, si pensaba que ya lo había visto todo en arquitectura, seguro al terminar de leer esto, sabrá que ahora es que le falta por ver.