Cada año grandes firmas, emprendedores, artistas y hasta fanáticos del diseño y la creatividad se congregan en Milán tanto para mostrar como para aprehender las más recientes tendencias aplicadas a distintas vertientes. Durante ese tiempo, la ciudad se convierte en un gran escenario, en una vitrina de novedades que tienen en común belleza, calidad, ingenio y tecnología. Y es que no es para menos, pues Milán tiene en su ADN lo avant garde.
Pero más allá de los eventos (hay cientos y para todos los gustos y públicos), en Semana del Diseño, Milán, a la que los romanos denominaron Mediolanun (por su estratégica posición geográfica), se divide en espacios que son una obra de arte en sí mismo. Acá hacemos un lista de 4 de las más interesantes.
La Edad de Caesarstone. Palazzo Serbelloni sucumbió este año ante la genial propuesta Stone Age Folk del creador español Jaime Hayon. Este, de la mano de la firma de cuarzo Caesarstone, combinó folclore, fauna, color y diseño en un pabellón que mezcla más de 48 colores de piedra con metal y vidrio. La obra hace que referencia al famoso Palacio de Cristal de Hyde Park en Londres, pasea al visitante por el producto industrial y diseño experimental. Esta muestra ha contado en ediciones anteriores con aportaciones de Oki Sato, Raw Edges, Philippe Malouin y Tom Dixon. (Ver video) (Corso Venezia 16)
A la luz de Filindeu. El espacio Brera de la marca de iluminación Foscarini, fue tomado en su totalidad por el arquitecto Giovanni Maria Filendeu, quien diseñó la instalación «Fare Luce». Usando recuerdos de su infancia y momentos especiales, ideó seis configuraciones diferentes que corresponden a diferentes formas de luz. ¿El resultado? Espacios mágicos en los que el juego de luces y sombras sumergen al visitante en sus propias memorias. (Via Fiori Chiari, 28)
Todo conectado. Noruega es una constante en la Semana del Diseño de Milán, esta vez de la mano de la diseñadora y arquitecta de interiores Katrin Greiling el país se muestra con una exposición que reúne a los más connotados talentos noruegos contemporáneos en diseño y artesanía. “Everything is Connected” es pues, una oportunidad para acercarse a una nación que parece muchos distante y fría, con óptica creativa y moderna. (6 Vía Ventura)
En pequeño. MINI Living Breathe es una instalación diseñada por los arquitectos neoyorquinos SO-IL. Ellos se inspiraron en las pequeñas viviendas de las áreas urbanas para crear un submundo residencial en la mitad de la ciudad. La innovadora propuesta cuenta con materiales reciclables y está concebida para impactar lo menos posible el ambiente. (Via Tortona 32)
Como dijimos antes estos son solo 4 de las múltiples opciones que se abren en Milán cuando ésta se despoja de su faceta fashion y se viste con la magia de la creatividad.