El refrigerador es una de las piezas fundamentales de nuestra cocina, y su ubicación en el triángulo de trabajo de la misma es fundamental. No obstante, este aparato, en el que almacenamos la mayor parte de los víveres perecederos, tiene requerimientos importantes que hay que tomar en cuenta a la hora de escoger un espacio para él.
Como este es uno de los electrodomésticos más grandes de hogar, siempre es complicado ubicarlo. No obstante, existen reglas muy básicas para su instalación sin importar el tamaño de su cocina.
Por eso, la regla de arranque de todas las que vamos a compartir es evaluar el tamaño de la cocina o el espacio del que se dispone en ella, antes de comprarlo. El frigorífico debe ser un aparato que se adapte tanto a sus necesidades de almacenamiento de alimentos, como al lugar en el que será colocado.
4 reglas básicas
Nuestros 8 tips empiezan con 4 reglas básicas para la ubicación de este aparato en la cocina:
- Respete el triángulo de trabajo. El triángulo de trabajo es un área de movimiento usada por los diseñadores de interiores para hacer de la cocina un espacio productivo y ergonómico. Este ubica al refrigerador, fregadero y estufa en una distancia entre 122 cm y 275 cm.
- Lejos de zonas calurosas. Nunca debe ponerse una nevera cerca de una fuente de calor frecuente como por ejemplo, cerca de la estufa u horno, o frente a las ventanas debido a que la excesiva exposición a la luz y al calor directo puede dañar el aparato.
- Nunca olvidar la ventilación. Generalmente se coloca el refrigerador pegado a una pared. Si bien esta posición no es en teoría mala, no obstante, lo que si debe recordar es que este aparato necesita ventilación, razón por la cual, si desea ponerlo contra una pared deberá dejar, entre esta y el equipo, una distancia de 15 cm. Este espacio también debe existir en el caso de que este electrodoméstico esté empotrado. Pero además se aconseja que, en esta situación, también se deje un área de al menos 1 cm de cada lado para evitar arañazos y permitir que el aire circule. Recuerde que su nevera genera calor constantemente.
- Cerca de la electricidad y tuberías de agua limpia. Tener una toma eléctrica exclusiva para el refrigerador le permitirá colocarle incluso un regulador de voltaje que mantendrá el equipo a salvo de cualquier bajón. Lo de ponerlo cerca de tuberías de agua limpia aplica si usted tiene dispensador de hielo u agua en este equipo, de lo contrario, no es necesario.
4 ideas para su colocación
Teniendo en cuenta las anteriores reglas, ahora viene la creatividad en la ubicación del frigorífico en la cocina. Tome nota:
- Posición privilegiada. En la actualidad los refrigeradores son tan grandes, anchos o bellos como usted quiera. El mercado está repleto de opciones dispuestas a complacer no solo sus necesidades de almacenamiento, sino sus requerimientos estéticos, razón por la cual muchos diseñadores han roto con la regla del triángulo de trabajo y han colocado este aparato en zonas alejadas del encuadre normal. Evidentemente esto aplica a cocinas grandes, en las que es normal tener una versión pequeña de este aparato debajo de la encimera para facilitar el trabajo a la hora de cocinar.
- A un costado. Esta se cree que es la ubicación perfecta del refrigerador. En las cocinas de tipo lineal este es el elemento de cierre y hace que el triángulo de trabajo se mantenga.
- En ángulo. ¿Por qué no? Hay espacios que suelen desperdiciarse, si la nevera cabe en él, úselo y dele un toque distinto a su cocina.
- Esto también está muy de moda. De hecho muchas marcas aceptan personalizar las puertas para que el refrigerador empotrado pase desapercibido. Es cuestión de gustos.
Como verá estos 8 tips le proveerán no solo de ideas fuera de lo común para colocar su frigorífico, sino que le ayudarán a optimizar su vida útil y cuidar la inversión que hizo en él. (Ver también Cómo organizar el refrigerador en 5 pasos)