Se le llama arquitectura ecológica al proceso de diseñar y construir estructuras eficientes utilizando métodos eco-amigables que reducen el impacto negativo de sobre la salud humana y medio ambiental.
En este tipo de arquitectura todo se toma en cuenta: el sitio donde se va a construir, el diseño, los materiales empleados en la construcción, las fuentes de energía y su eficiencia, el mantenimiento y hasta la demolición. Este tipo de arquitectura honra 3 principios básicos:
1. Diseño ecológico
La arquitectura ecológica incorpora materiales reciclados en su construcción; la utilización de tecnologías eficientes y la creación de sistemas cerrados (utilizar los desperdicios para la creación de energía, por ejemplo). Este tipo de arquitectura busca utilizar materiales que tengan una huella de carbono más ligera. Madera ecológicamente certificada, bambú o paja, piedra y metales reciclados, tierra o barro, son de los materiales reciclados más empleados.
El objetivo primordial del diseño ecológico es mejorar la eficiencia en el uso del agua y energía, además de crear construcciones que sean amables sobre la psicología humana y sobre el medio ambiente. Para ello la arquitectura ecológica emplea curvas, módulos, ramificaciones u otras formas que ocurren en la naturaleza, incorporándolas según su función.
2. El sitio de construcción
La protección de los sistemas ecológicos es otras de las máximas de la arquitectura ecológica que antes de considerar construir en sitios nos urbanos hace un análisis de los efectos que tendría sobre los sistemas naturales. De hecho, los estudios que se guían por las directrices de la arquitectura ecológica evitan construir en lugares delicados, parques y tierra fértil.
La arquitectura ecológica también busca espacios que le permita sacar aprovecho de las energías naturales. Esto quiere decir que los actuales arquitectos ubican una construcción tomando en cuenta la dirección del viento, sol, corrientes de agua, etc.
3. Reducción de desechos
La arquitectura ecológica incluye en su construcción maneras de reducir y/o reciclar los desechos. Así pues, idealmente en una construcción orientada bajo su egida hay botes de basura para reciclaje, tanques y tuberías para el reciclaje del agua de lluvia, baños secos o tanques para la producción de biogás, y sistemas de composta, por solo nombrar algunos de los más comunes.
Un gran ejemplo del concepto
En la provincia de Vinh Phuc (Vietnam), el arquitecto vietnamita Vo Tong Nghia desarrolló una estructura en la que no se emplearon ni acero, ni otros materiales estructurales manufacturados. Bamboo Wing es este espacio de reunión de 1.600 m2, hecho en bambú y cedro rojo.
Usando técnicas de la antigua arquitectura de China y Japón, Vo Tong Nghia creó una estructura con la que redescubre los modos de construcción tradicionales que conjugan la armonía de la naturaleza con el aprovechamiento de recursos locales. Vo Tong Nghia usó en esta edificación madera laminada en lugar de la madera maciza la cual provino del cedro rojo cosechado en la zona.
En palabras de su creador, Bamboo Wing toma la forma de alas de ave y flota sobre el paisaje natural. Este edificio que no tiene columnas verticales, captura el viento gracias a que si techo tiene forma de alas, lo cual lo hace una construcción ecológica gracias a que este detalle minimiza el uso de aire acondicionado.
Uno de los encantos de este edificio es que sus aleros profundos y el agua que lo circunda, hace que las personas se sienten como si estuvieran viviendo en la naturaleza.
Así pues, la eco arquitectura o la arquitectura ecológica realiza un balance de todas las fases involucradas en la construcción de una edificación: desde el diseño, pasando por el uso, la finalidad y el tiempo de vida, pues la reutilización de la construcción per se otra de las preocupaciones de esta nueva concepción de la arquitectura.
No todo lo ecofriendly o verde es realmente arquitectura ecológica. Este concepto tiene características determinantes que harán de las ciudades del futuro espacios más vivibles y respirables.