
Si creías que un refrigerador no podía ser el alma de la fiesta, es porque aún no conoces el Smeg FAB5. Compacto, colorido y con ese toque vintage irresistible, este mini refrigerador es la prueba de que el diseño y la funcionalidad pueden ir de la mano… con mucho estilo.
Ya seas un interiorista en busca del toque perfecto para un proyecto de hotel boutique, un arquitecto diseñando un loft de ensueño o simplemente un amante del diseño que quiere elevar su espacio, el Smeg FAB5 está aquí para demostrar que el tamaño no define el impacto.
Más que un refrigerador, un ícono de diseño
Lo primero que atrapa del FAB5 es su estética. Con líneas redondeadas y esa esencia retro-chic que ha convertido a Smeg en un referente, este mini refrigerador tiene la capacidad de transformar cualquier espacio.
Disponible en colores vibrantes como rojo, naranja y azul pastel, o en opciones más sofisticadas como negro, crema o blanco, el FAB5 no solo mantiene tus bebidas frías, sino que añade personalidad a cualquier rincón. Así que como una clave para interioristas y arquitectos podemos decir que un FAB5 en rojo puede ser el acento perfecto en un estudio creativo. En tonos pastel, aporta un aire relajado a un hotel boutique. En negro o acero inoxidable, suma elegancia a una oficina de alto nivel.
Pequeño en tamaño, gigante en estilo
Con sus 40 litros de capacidad, este refrigerador es la opción ideal para espacios compactos donde cada centímetro cuenta. Su tamaño lo hace perfecto para:
- Suites de hotel y habitaciones de lujo, aportando comodidad sin romper la armonía del diseño.
- Estudios y oficinas premium, convirtiéndose en el compañero perfecto para esos días de trabajo intenso.
- Salas de reuniones y coctelerías privadas, porque ¿quién dijo que el diseño no puede ir acompañado de un buen brindis?
- Apartamentos pequeños o lofts modernos, donde cada elemento tiene que sumar funcionalidad sin sacrificar estilo.
Eficiencia, tecnología y silencio absoluto

A pesar de su estilo vintage, el FAB5 es totalmente moderno en su rendimiento. Con eficiencia energética de clase A, es amigable con el ambiente y con tu factura eléctrica. Además, su funcionamiento silencioso lo hace perfecto para espacios donde el ruido debe ser mínimo.
Por si fuera poco, su sistema de refrigeración por absorción es casi imperceptible, lo que lo hace perfecto para hoteles boutique o habitaciones de lujo donde el confort es prioridad.
Más que un electrodoméstico, el Smeg FAB5 es una declaración de estilo. Es ideal para quienes buscan exclusividad, diseño y practicidad en un solo producto. Porque al final, un refrigerador puede ser mucho más que un simple electrodoméstico: puede ser la pieza que transforme un espacio.
¿Te atreves a darle un toque retro-glam a tu proyecto?